¿Te encanta cambiar la decoración cada cierto tiempo? Las casas prefabricadas te permiten cambiar de entorno cuando quieras. Interesante, eh…
Las casas prefabricadas acumulan un sinfín de características positivas, y la mayoría de ellas se encuentran en alza actualmente. Nos encontramos frente a estructuras que reducen el gasto económico hasta límites increíbles, y no sólo en la fase de construcción, sino también mediante el mantenimiento a lo largo de los años. Así, los materiales, la mano de obra, la posibilidad de construir cimientos leves, el aislamiento en los muros y el aprovechamiento del espacio -por citar unas cuantas- reducen el gasto de la estructura de forma considerable. Y esto se nota en el bolsillo a corto plazo. Por otro lado, si partimos de una vivienda construida correctamente, bien aislada, el gasto en calefacción y demás sistemas de control de ambiente disminuyen, lo que supone un ahorro a medio y largo plazo.
Otro factor que ayuda a decantar la balanza es su vertiente sostenible. Las casas prefabricadas se construyen en laboratorios especializados, por lo que su producción, controlada al detalle, minimiza los residuos en un alto grado. Es decir, nos encontramos ante una apuesta por la limpieza y la economía de recursos.
Por último, conviene destacar la evolución el diseño de las casas prefabricadas. Se acabó aquello de cuatro paredes y une tejado. La moda manda y la modernidad trae estructuras de todo tipo e incluso la mezcla de materiales, que confieren a la vivienda un carácter vanguardista.
Los argumentos que hemos colocado encima de la mesa nos permite llegan a una conclusión tan clara como concisa: el ahorro económico, la sostenibilidad y la posibilidad de escoger ubicación se traduce en una mejora de calidad de vida.
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Imágenes: engelvoelkers.com, casasprefabricadas24.com, casasamericanas.es