Hoy nos salimos un poco por la tangente para mirar hacia lo que pocos podemos tener. ¿Echamos un vistazo a la decoración baños de lujo? A ello.
Pocos tenemos baños de lujo, es una realidad. Ahora bien, también lo es que las grandes marcas se fijan en ellos para configurar estilos modernos y contemporáneos. En sí, no deja de ser una forma un tanto sui géneris de acercarnos a la pequeña burbuja de la altas esferas.
Encontramos diferentes premisas que definen este tipo de espacios, convencionales o de lujo. Las más importantes son el orden, porque debido a su uso el baño no puede ser una estancia donde los objetos incomoden; la luminosidad, porque a menudo resulta un lugar cuya finalidad es relajarse; y la limpieza, ya que no podemos asearnos en un lugar que no cumpla los mínimos sanitarios. En base a lo expuesto, se construye el espacio.
¿Pero qué ventaja tienen los baños de lujo respecto a los baños que tiene cualquier otro mortal? A juzgar por las imágenes, el espacio, una cantidad de espacio que bien podría ser medido en hectáreas, y la posibilidad de una iluminación natural capaz de iluminar a través de las paredes. Extremos. Sin embargo, debemos reconocer que el factor espacio se encuentra al margen de los criterios de un decorador, y lo mismo podemos señalar de la luminosidad, que viene dada por la arquitectura de la vivienda. Tanto un factor como el otro convergen en un punto clave, aportar al baño un plus de libertad y una gran sensación de comodidad.
En los baños de lujo abundan los azulejos de tonalidades claras, espejos sofisticados, mármol o madera y grandes efectos visuales como bañeras junto a grandes ventanales o mosaicos en las paredes. Asimismo, con el tiempo se están empezando a ver baños con estética de los años 20, colores oscuros que aporten sobriedad y bañeras básicas que apuestan por el romanticismo clásico.
Dejar esto aquí sería marcharse un poco con los dientes lagos, así que aquí van un par de ideas para trabajar nuestro baño en esta línea: si no tienes iluminación, utiliza un gran espajo que abarque gran parte de la pared, trabaja las medias alturas y arriesga con los azulejos: grandes, de piedra, con mosaicos…