Siempre hablamos de vinilos para decorar paredes. Pero y si hablamos de otros vinilos… los discos de vinilo. ¡Rock and roll!
No podemos negar la evolución, y por mucho que los discos de vinilo vuelvan a estar de moda, nosotros estamos inmersos de pies a cabeza en la era digital. En consecuencia, amontonamos los discos de vinilo en armarios; tristes porque no encontramos ocasión para utilizarlos y contrariados porque ni queremos regalarlos y mucho menos tirarlos a la basura. Eso hora de darles un uso.
Lo de colgar cuadros está muy bien, sobre todo porque hay infinidad de diseños fascinantes. Sin embargo, hay un pequeño grupúsculo -normalmente urbanita- que cree que es una tendencia relativamente demodé, demasiado estándar. Este perfil busca ideas alternativas que rompan con el statu quo de su alrededor. Una opción sencilla de dislocar la rutina decorativa de nuestro entorno es colgar en las paredes discos de vinilo. Aporta un toque diferenciado y único con una carga importante de carisma. Asimismo, puedes colocar uno, o crear un muro plagado de ellos, jugando con los colores y los tamaños.
No queremos perder la oportunidad de englobar este tipo de decoración dentro de un contexto estético. Decoración retro, estaba claro. Un buen collage de vinilos te garantiza el engranaje perfecto de piezas estilo vintage, ya que no desentona en absoluto junto al mobiliario de los años 70 u 80, plagado de aluminio, metal y sofás de sky.
01Imágenes: pinterest.com